Friday, April 24, 2009

Defectuoso y FLUído


Muy temprano por la mañana me despierto exaltado por un ruidillo familiar: mi teléfono celular timbraba. Entre sueños logro contestar y una voz enigmática me dice: Orwell tenía razón. Fin de la llamada. Sobresaltado y sudando me pellizco un cachete para ver si no sigo soñando, agudos dolor y sensación de realidad, calma que sobreviene. Vaya locos que hay hoy en día.

Me levanto, orino, regreso a mi cuarto y realizo el ritual matinal sin cambios significativos. Ducha, desayuno, mirarse al espejo, salir, caminar por la calle. Todo parece tan común. De repente: desasosiego.

Es viernes y la ciudad se siente sin esclerosis. Se anda sin estrés, con libertad. El metro está casi vacío. El paísaje es inusual, parece que fuera un día feriado. Más desasosiego: ¿Será sábado y de nuevo perdí la cuenta de los días, estaré volviendome un autómata?. Pienso en la llamada matutina, se me ponen los pelos de punta.

¡Tuvimos un sirenito, justo al año de casados....! el ruido infernal de una mochila estéreo y el agudo grito de: !Los grandes éxitos de la cumbia en formato mp3! me sacan de mi paranóico letargo. Tacubaya dicen los letreros, hay que bajar.

Doy unos cuantos pasos sobre el andén, subo las escaleras. El ambiente es distinto, la gente se mira con reticencia, no se acercan los unos a los otros. Ansiedad: me detengo al ver que llevan cosas azules en la cara. Cubrebocas por doquíer. No me atrevo a preguntar, camino rápido y confundido.

Pasos adelante un hombre vocea el títular de Metro: !Influenza Porcina ataca la ciudad! ¡Sesenta muertos es la cifra! ¡No toque a nadie! ¡Aléjese de las personas! !Corra por su vida¡

Histeria: comienzo a correr, tropiezo y el suelo recibe mi cabeza con sonoro azotón. Negro. Gris. Borroso. Entreabro los ojos y se ha formado un tumulto a mi alrededor, me tallo los ojos, no comprendo nada de lo que dicen. Sólo hay chillidos ininteligibles. Terror: por fin comprendo la llamada telefónica. Justo antes de volver a desmayarme distingo que los cerdos con ropa y cubrebocas se abalanzan sobre mi.

3 comments:

Unknown said...

"todos los animales son iguales, unos más iguales que otros" así quedó el último y único que quedó de los siete mandamientos y puesto que sigues vivo, asumo que te encontraron cuando todavía eran amigos Napoleon y Bola de Nieve, de lo contrario los perros hubieran acabado contigo. Maldita sea, extraño mi ciudad.

INQUIETOS said...

Muy bueno Rubén...aaaaaacchuuuuu!!! (salud...?¿?)

Antojeria de Arte y cultura said...

oye hoy sacaron del aire el programa te recuerdo que grabaste este escrito para el mismo y fue transmitido al aire, despues de la mitad me informan que lo cortaron creo que habra represalias me llamo la directora de la estacion para que firmara una carta responsiba del contenido del programa era una satira critica respecto al tema que tan apanicados tiene a todos, comentale a tu cuate de la jornada
supòngo que ahora si lo querran cancelar pues me hablo de la linea del programa y de lago asi como pre censura pues segun dijo eso se evitaria si llevara antes el programa, al parecer queire hacer grandes las cosas pues amenazo con demandas, yo pienso que podemos usar esto como publicidad para el show y buscar un nuevo hogar en tierras mas prosperas, porfa contestame de enterado